Diputación ha repartido más de 60.000 libros

Diputación ha repartido más de 60.000 libros

En las 176 bibliotecas municipales de la provincia. Una medida gratuita para las bibliotecas, como iniciativa fundamental para fomentar la lectura y apoyar la cultura.

El servicio de Bibliobuses, gracias a la colaboración entre la Junta de Comunidades y la Diputación de Toledo, desarrolla una labor imprescindible allí donde no hay bibliotecas. 

El Gobierno de la Diputación ha dado un impulso muy importante a la donación de libros para las bibliotecas municipales de los pueblos de la provincia de Toledo en los últimos seis años, superándose los 60.000 libros repartidos entre las bibliotecas municipales.

El trabajo de edición y adquisición de ejemplares de todo tipo y temáticas por parte del servicio de publicaciones provinciales se ha incentivado en el último sexenio, durante el Gobierno de Álvaro Gutiérrez, procurando un servicio esencial a las 176 bibliotecas municipales de la provincia de Toledo.

Para lograr ese número de libros, desde el Servicio de Publicaciones se adquieren ejemplares de diferentes editoriales u otras entidades con capacidad editorial, para distribuirlos gratuitamente entre las bibliotecas públicas de la provincia y otras instituciones interesadas en su difusión.

Gracias a esa labor lectora y cultural de la Diputación de Toledo se facilita el acceso de los toledanos y toledanas de todas las edades que acuden de forma habitual a esos espacios consagrados a la literatura y la investigación, cuya presencia en los pueblos y ciudades de la provincia de Toledo resulta fundamental para mantener viva la llama de la inquietud por el conocimiento o la lectura en general.

Esa labor de promoción cultural y fomento de la lectura se ve reforzada a diario con el servicio de dos bibliobuses, que llegan a todos los rincones de la provincia de Toledo gracias a la colaboración de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y la Diputación de Toledo.

De este modo, los gobiernos provincial y regional aseguran el acceso a la cultura de la ciudadanía, para que nadie se vea privado de este derecho, independientemente de dónde vivan, o por residir en aquellas poblaciones pequeñas que no disponen de recursos ni de un espacio físico para contar con una biblioteca municipal.