Diputación: Condena a la violencia machista en las puertas de la institución
La vicepresidenta de Educación, Igualdad y Bienestar Social, Ana Gómez, ha leído el manifiesto para conmemorar el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, tras guardar un minuto de silencio por las víctimas.
Representantes de todos los grupos políticos representados en la Diputación de Toledo, del equipo de Gobierno de la Institución, y los trabajadores y trabajadoras, se han unido hoy para condenar con su presencia la violencia machista y recordar, con un minuto de silencio, a las 1.074 mujeres asesinadas en España desde el año 2003.
La fachada de la Diputación de Toledo se ilumina de morado hasta el domingo, 29 de noviembre, para denunciar la violencia machista y en defensa de los derechos de todas las mujeres.
El presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, ha encabezado el acto celebrado en las puertas de la Diputación de Toledo para condenar la violencia machista y conmemorar, como cada 25 de noviembre, el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, además de recordar a todas las mujeres asesinadas.
Los representantes del equipo de Gobierno de la Institución, de los grupos políticos representados en la Diputación de Toledo, así como los trabajadores y trabajadoras o la delegada provincial de la Consejería de Sanidad en Toledo, Rocío Rodríguez, han querido unirse hoy a los numerosos actos convocados en todo el planeta para repudiar la violencia contra las mujeres.
En recuerdo a las víctimas de esta barbarie se ha guardado un minuto de silencio en recuerdo de las mujeres asesinadas, que en España suman 1.074 desde el año 2003, en una incesante e inaceptable suma de asesinatos que una sociedad moderna y democrática no puede permitirse.
La vicepresidenta de Educación, Cultura, Igualdad y Bienestar Social, Ana Gómez, ha leído un manifiesto en el que se ha puesto de relieve la necesidad de dar visibilidad a una de las violaciones de derechos humanos más extendidas, persistentes y devastadoras del mundo actual.
En ese manifiesto se ha condenado enérgicamente la violencia contra las mujeres, aludiendo a la necesidad de desarrollar políticas de igualdad y sensibilización social para acabar con todo tipo de violencia contra las mujeres que pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada.
Del mismo modo, se ha recordado la escalofriante cifra de mujeres asesinadas en este año 2020, marcado por la pandemia del coronavirus, en el que hasta la fecha han sido asesinadas 41 mujeres en España, 3 de ellas en Castilla-La Mancha y 1 en la provincia de Toledo.
Acabar con la violencia contra las mujeres es una exigencia irrenunciable en una sociedad decente e igualitaria, que demanda respuestas eficaces e inmediatas para proteger a las mujeres que sufren maltrato y a sus hijos e hijas, que también padecen las consecuencias de la violencia de género, y erradicar esta lacra.
La vicepresidenta ha confirmado el compromiso de la Diputación Provincial de Toledo en la lucha por la libertad y los derechos de la mujer, potenciando desde esta institución una estrategia transversal de género, como así se lleva haciendo desde 2016, que amplíe políticas públicas de fomento de la igualdad y de rechazo a cualquier forma de discriminación y de opresión machista, haciendo más hincapié, si cabe, en estos momentos de crisis sanitaria, económica y social.
La Diputación se ilumina de morado
Además de la concentración llevada a cabo en las puertas del Palacio Provincial, la Institución iluminará su fachada cada noche de esta semana, hasta el próximo domingo, en una acción que simboliza la condena expresa de la violencia machista, la protección de las víctimas y la defensa de los derechos a una vida libre y segura de todas las mujeres.
La Diputación de Toledo se suma así a una iniciativa que nació con el objetivo de dar mayor visibilidad al Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y a su significado.
La Institución, por tanto, con la iluminación de su fachada defiende los principales motivos de esta conmemoración en contra de la violencia contra las mujeres: porque es una violación de los derechos humanos; es consecuencia de la discriminación que sufre la mujer; afecta e impide la erradicación de la pobreza, la paz y la seguridad; porque se puede evitar y la prevención es posible; y porque sigue siendo una pandemia global.
MANIFIESTO DÍA INTERNACIONAL PARA LA ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER
Naciones Unidas conmemora cada 25 de noviembre el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, una jornada reivindicativa para visibilizar una de las violaciones de derechos humanos más extendida, persistentes y devastadoras del mundo actual.
Violencia globalizada, sin fronteras, sin límites de sociedades, sin distinción de clases, etnia o grupo de pertenencia y dirigida a todas las mujeres y niñas.
Violencia sistemática que se ha venido configurando como violencia sexual, violencia doméstica, asesinatos por parte de nuestras parejas o familiares, trata de seres humanos con fines de explotación sexual, matrimonios forzosos, matrimonios infantiles, embarazos precoces, mutilación genital femenina, relaciones sexuales forzadas, acoso escolar, ciberacoso o acoso laboral.
Esta subordinación del género femenino a través de la violencia se ha visto combinada con una discriminación histórica que ha tenido su fundamento en una visión hetero patriarcal de la sociedad en la que el lugar de las mujeres ha quedado relegado al ámbito privado de los cuidados.
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Desgraciadamente, hoy estamos aquí para recordar a las 1.074 mujeres asesinadas en España desde 2003, 41 en este año, 3 de ellas en Castilla-La Mancha y, más concretamente, 1 en la provincia de Toledo; a las más de 1.800.000 que denunciaron a sus agresores o a las más de 925.000 mujeres que llamaron al 016 desde 2007, según los datos registrados por la Delegación del Gobierno con la Violencia de Género.
Como hemos conocido a través de la macro encuesta de Violencia contra la Mujer 2019, 1 de cada 2 mujeres reconocieron haber sufrido algún tipo de violencia machista. Y lo que debe suponer un impulso en las políticas de protección y acompañamiento de las víctimas, el 78% de las mujeres que han sufrido o sufren maltrato de sus parejas o ex parejas no ha denunciado. Tampoco debemos olvidar que más de 1.700.000 menores viven en hogares en los que la mujer está sufriendo en la actualidad algún tipo de violencia en la pareja.
Estos escalofriantes datos, nos obligan a considerar las políticas públicas de igualdad entre hombres y mujeres como prioritarias e imprescindibles. Por ello, es fundamental que las administraciones trabajemos de manera coordinada y conjunta en todos sus niveles. Debemos potenciar actuaciones integrales de todos los organismos y la sociedad civil en la lucha feminista, haciendo especial hincapié en el ámbito rural, con medidas de prevención y proporcionando recursos de asistencia, acompañamiento y protección a las víctimas en los municipios. Poner fin a la violencia de género es, y debe seguir siendo, uno de los más importante objetivos de las instituciones y de la sociedad en su conjunto, para ello es imprescindible aunar esfuerzos en la prevención, en acciones programadas y coordinadas y en la movilización comunitaria si queremos erradicar todas las formas de violencia contra la mujer.
Una sociedad decente exige avanzar hacia una comunidad libre y segura, que garantice una respuesta rápida y efectiva a las mujeres que sufren violencia, así como a sus hijos e hijas, generando y ofreciendo los mecanismos necesarios para conseguirlo.
Año tras año, venimos denunciando las dramáticas consecuencias de la violencia de género, fruto de las desigualdades sociales que sitúan a la mujer en una posición de vulnerabilidad y que, a pesar de que la lucha ha sido incesante y esperanzadora, no han remitido en la actualidad.
Desde la Diputación Provincial de Toledo queremos mostrar nuestro firme compromiso en la lucha por la libertad y los derechos de la mujer, potenciando desde esta institución una estrategia transversal de género, como así se lleva haciendo desde 2016, que amplíe políticas públicas de fomento de la igualdad y de rechazo a cualquier forma de discriminación y de opresión machista, haciendo más hincapié, si cabe, en estos momentos de crisis sanitaria, económica y social.